Solig dag i Malmö / Un día soleado en Malmö

Hejsan!

Hur är läget?

Kära vänner, ni väntad.... ¡¡hosti!! ¡¡que me pongo a hablar sueco y es que es un no parar!!

¿Cómo están ustedeeeeees? ¡Bieeeeeen!

Gracias a todos los que habéis pedido amablemente que actualizásemos el blós. Como diría su majestad (la de ustedes) (porque a la de aquí yo no la entiendo, todavía): "me llena de orgullo y de satisfacción" que nos leáis e incluso que nos reclaméis noticias... cuánto masoca suelto, mother mine!

Nuestro ritmo de acontecimientos ha disminuido un poco en esta última semana y media, aunque no por ello nuestra sorpresa (casi siempre agradable) ante las cosas que pasan aquí, o mejor dicho, cómo pasan aquí. No me voy a enrollar con comentarios comparativos generales (solo con cosas concretas, no cantéis victoria), pero sí os digo que es estupendo, magnífico, ¡cojonudo! el estar alejado del choriceo/politiqueo de España. Y es cojonudo ver que aquí las cosas funcionan bastante bien, sin que haya, ¡pardiez! algún mangurrián detrás intentando aprovecharse. Vale, vale, ya me callo.

Bueno, no. El domingo nos levantamos con un sol de escándalo, así que decidimos irnos a andar por el campo todo el día. Dicho y hecho: a Malmö (tercera ciudad de Suecia) a sentarnos en una terraza frente al mar. ¿Alguien ha dicho coherencia? pues que se calle.

Malmö, tercera ciudad de Suecia, está a unos 15 minutos en tren de Lund. Así que es un "paseito" desde Lund (en una visita anterior fuimos en bici). La idea era pasear por Västra Hamnen, un barrio "nuevo" de Malmö, pegado al mar, por el que la ciudad ha apostado fuerte.

Así será Västra Hamnen. Bueno, con alguna nube más. Fuente: malmo.se

Pretenden que sea un "polo" de empresas, así como un núcleo residencial "de lujo" (esto útimo lo digo yo, pero vamos, salta a la vista). Hay edificios bastante espectaculares, aunque algunos en construcción, así como parte de las calles y de los parques (luego volveré al tema verde). Pero la parte que da al mar, y que queda muy cerca de la bonita playa de Ribersborg, está totalmente terminada. Es donde están los edificios de apartamentos (con unas vistas tremendas), y varios restaurantes, entre ellos V.E.S.P.A., el hmmmm italiano donde comimos (a propuesta de Cris), o mejor dicho, casi no comimos, porque.... dejémoslo en que pedimos las pizzas hoy y nos las trajeron pasado mañana :-) sin duda estaban desbordados por la cantidad de gente que había. Claro (calvo): rayo de sol, uo oh oh, ¡y todos los suecos y los no tan suecos a la p*** calle!

La joya de Västra Hamnen, el epicentro del lugar, y punto de interés turístico en toda la región de Öresund y del sur de Suecia es, como algunos sabréis, el Turning Torso, de Santiago Calatrava.

Ojú, qué dolor de cuello

Es el edificio más alto de Escandinavia, ahí es ná: 190 metros y 57 plantas. Nos contó Cris que, en principio, iba a ser exclusivamente residencial, pero que como los pisos son caríííííííííísimos, lo abrieron también a uso para oficinas. Lo que sí vimos es que sigue siendo fundamentalmente residencial, y por ello no se puede entrar (lo intentamos, por supuesto, y si no llega a ser por un señor ataviado con chucho que nos miró con la córnea del revés, igual nos colamos al más puro estilo gincho-espanish).

¿Esto cómo se mira?

Se quiso construir en esta zona, antes de uso industrial y durante los últimos tiempos muy deteriorada, un edificio muy representativo. Cierto responsable del asunto vio un boceto de Calatrava, de un torso girado, y propuso encargarle a él el proyecto. El objetivo se consiguió, sin duda, porque el Turning Torso se ve desde muchos kilómetros a la distancia, incluso desde Copenhagen, al otro lado del estrecho de Öre. He de reconocer que a mi el edificio en sí me gusta, aunque quizá no en este contexto: todos los edificios de alrededor son bajos, y a mi me parece que este queda un poco pegote. No se lo diré a Calatrava, que luego se enfada y no veas. Tiene un genio el tío...

Casas flotantes

Las chabolillas de Västra Hamnen

Esta es la entrada a uno de los edificios residenciales: un jardín tropical, con sillitas para que los suecos fotosinteticen (cuando puedan, claro). El proyecto se llama "The glass bubble"

El magnífico y soleado día provocó la estampida sueca que os comentaba más arriba, como se puede ver en este gráfico:

Sueco soy, y en carbón me convertiré

Es más, ayer miércoles tuve que ir de nuevo a Malmö por razones que no vienen al cuento, y en el tren cogí el periódico Metro (sí, el mismo que hay en Madrid). Y qué sorpresa, qué alboroto, otro perrito piloto: ¡en la portada aparece la noticia del buen tiempo del domingo! Y un detalle: sacaron en la portada a una alemana tomando el sol. Normal, como no había ningún sueco...

Titular: "20 grados en Skåne, durante el fin de semana".
Toma, toma, pastillas de goma.

Después del ágape (más por duración que por cantidad, que tampoco fue pequeña), nos fuimos a pasear por el peacho parque que hay entre Västra Hamnen y la playa de Ribersborg, y Cris comentó con mucho acierto que lo que más le llamó la atención de este sitio es que en España rápidamente se habrían cepillado el parque para hacer bloques de pisos, siendo este un tremendo espacio frente al mar. Bien: aquí, no. No, no es increíble. Es, simplemente, razonable.

Qué vengan las hormigoneras, ¡rápido!

Lo que sí es increíble es esto:

Hmmm, qué ganas de darse un bañito

El puente de Öresund, que llegó a ser el más largo del mundo sobre el mar (7.845 Kms), une Malmö (Suecia) con Copenhagen (Dinamarca). Es tan largo se ha salido del blog

Seguimos nuestro paseo por Ribersborg, aquí aparecen Mery y Cris, con el Turning Torso de fondo.

Bueno, bueno, ¡menuda carrerilla cogimos! es que nos ponemos andar y no hay quién nos pare los pinreles. De ahí fuimos hacia el centro de Malmö, viendo escenas tan curiosas para el buen ojo ibérico como madres corriendo (haciendo deporte, no porque tengan prisa) mientras empujan el carro con su bebé dentro... y el bebé como si nada. O tipos llevando a su perro (de descomunales proporciones) en su bici.

Luego nos metimos en el Stadsparken. Un estudio de 2007 puso a Malmö como la cuarta ciudad más verde. ¡Del mundo! Este parque, desde luego, es MUY bonito.

Tras una escala en la cafetería Pronto, para reabastecernos a base de tarta de queso (agotados después de semejante paliza andando), y una escala en el cine para ver la última de Woody Allen (muy recomendable), terminó nuestro día con esta bonita postal de este puente y, para satisfacer vuestras ansias informativas, os informo de que no tengo NPI de cómo se llama. Pero es bonito, ¿no?

Cuando vengáis a vernos iremos a Malmö, si sois buenos.

Hej då och till nästa posten!!