viernes, 31 de agosto de 2012

Volvo 245

Amigos del motor (y demás amigos),

El pasado sábado tuvimos una experiencia no religiosa (sería raro) sino musical, o familiar, o rural, o motorizada, o todo junto. En cualquier caso, una experiencia que merece ser relatada y compartida con vosotros.

Unos días antes, María recibió una invitación de uno de los compañeros con los que trabaja. La invitación era para ir a un concierto en el que iba a tocar su banda (él, a la guitarra) y "algunas bandas más". Todo parecía muy profesional, porque tenía hasta nombre molón y todo: Westfield Rock Festival.

¿Palmeras tropicales? ¿Ein?
Casi a la vez de la recepción de la invitación, ya le fue comentado su compañero, de nombre Kalle (pronúnciese "Cale"), que bueno, tú sabes, el concierto es en mi granja (!), que está un poco aislada (!), va a ser la primera vez que toquemos (!!) y vendrán unos 50 adultos y unos 50 niños (!!!). Y oye, aunque pone a las 4 de la tarde, vente mejor a las 6. Y traed salchichas, habrá un grill encendido.

Fieles a nuestro estilo, llegamos a las 7, sin salchichas pero con cervezas (eso, que no falte) y bastante curiosidad. Antes de ello, oye, nos recorrimos todas las carreteras de la comarca varias veces, hasta dar con la granjita de los c******. En efecto, estaba aislada. A medida que penetrábamos (uu) por el camino, nos percatamos de dos detalles: 1) no se oía música, 2) el nombre tenía sentido, estaba en el field y en el west. De momento solo faltaba el Rock.

Granja y gato contento
Aparcamos el coche en medio de los restos de la cosecha de trigo, y al salir vimos el mini-escenario, en el que no pasaba nada (de momento) y no nos habían mentido: mucho niño (y mucho padre, claro, es lo que tiene). Ni que decir tiene que nadie conocido. Mery y yo nos miramos con ojos de merluza de pincho. ¿Ponemos pies en Pontevedra? (como diría Gomaespuma). Venga, vamos a dar un voltio, vemos el percal, y como no conocemos a nadie, si eso nos escabullimos discretamente. ¡JA! Las dos primeras personas que vimos en nuestra exitosísima discreta vuelta fueron los dos únicos conocidos de Mery: el guitarrista per sé (Kalle) y Jörgen, otro compañero de trabajo. El recibimiento super entusiasta de Kalle (que realmente no se podía creer que hubiéramos ido) (nosotros tampoco, cinco minutos antes) nos convenció para quedarnos. Eso sí, hasta que oímos los primeros acordes nos dedicamos a remolonear por la finca y descubrir cosas interesantes, como un huerto muy profesional (y graaaaaande), un gato muy sobón, perales (no José Luis), parras (!) y.... ¡¡¡¡una higuera!!!! Inaudito.

Gallinas atletas

El peral y LA pera

El superhuerto. La pala, pretendidamente colocada

¡Remolacha!

Bosque húmedo tropical... digo... coles

La higuera y EL higo

La parricaaaa, con sus uvicaaaaas
Prestos y veloces, nos plantamos delante del escenario. Tan veloces que casi nos lo pasamos, tan pequeño era. Pero allí estaba el primer grupo de la tarde, y la primera peculiaridad: nombre oficial del grupo: "Midlife Crisis". Nombre oficioso y preferido por sus componentes: "Fast 'n Loud". Razón por la cual los componentes usan el nombre soso: porque a sus mujeres no les gustaba el otro, les parecía... provocador. ¿Alguna duda sobre quién lleva los pantalones en casa?


Midlife Crisis, entrando en acción. Hay que darse codazos, como véis
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El de la izquierda es Kalle, el compañero de Mery

Fans... ¿o simplemente hijas?

"Papá, apoyamos cuando haces ruido con la guitarra"

Kalle, dándolo todo
Empezó fuerte el show, con el siguiente estribillo: "When I had my very first ride, in a Volvo two-forty-fiveeeeee". A la Mery y a mi nos encantó semejante frase demoledora, tanto que no nos acordamos del resto de la letra, aunque sí del cantante, que cantaba... francamente. El público, aunque reducido, era de calidad: cada canción fue respondida con un estruendoso aplauso. Lo cual ocurrió... tres veces. Tres (3) son las canciones que tienen compuestas, y cuando la tercera terminó, y el público pidió un bis, bueno, pues.... pito pito gorgorito... venga, ¡Volvo 245 again! (ante el entusiasmo generalizado, el nuestro incluído). ¡Fans totales! Por cierto, aquí al pedir un bis, la gente grita "en gång till", que significa "una vez más", y se lo toman a pecho, porque tocan UNA más.

Luego salió la siguiente banda, cuyos componentes tenían aproximadamente la mitad de edad que los de la primera (que son, aún así, bastante jóvenes). El cantante, un chaval que llevaba su pantalón de chándal del Carreful, la parca de su padre, y las zapatillas de su abuelo (tres generaciones en una), demostró una energía envidiable. Vamos, que lo vivía el tío. En una de estas metieron entre los temas rockeros un baladón, y no veáis, casi se desgañita el colega. Brutal.

Se recomienda hacer zoom a las zapatillas de mercadillo

¡WEAH!

Harmónica man
Después de The Wingmen (así se llamaban los jovenzuelos), empezaron a tocar los estrellas del festival, tres tipos que venían desde... ¡Helsingborg! ¡a media hora en coche! y vestían los tres la misma camisa de cuadros roja y negra, sin duda obtenida en el mismo baúl que las pantuflas del cantante anterior. Cuando empezaron a tocar, la granja se convirtió en un infierno de ruido y destrucción, así que la Mery y yo aprovechamos para ir a dar una vuelta por la parte aún inexplorada. Y en ello estábamos cuando nos encontramos a Kalle, al que el grupo de Helsingborg le debía parecer tan malo como a nosotros, porque presto se prestó (atención: juego de palabras ;-)) a enseñarnos la casa. Uno de los edificios, un antiguo secadero de tabaco (momento en el cual yo me trasladé mentalmente a La Vera) lo están reconvirtiendo en salón para fiestas y parrandas. Y el edificio principal, que es su casa, la han renovado entera y es preciosa.

La chocita de Kalle y familia

Ancha es Skåne

Midlife Crisis: una banda moderna para jóvenes maduros :-)




La granja. En primer plano, la nave. La casa es la de la derecha, cubierta de hiedra

Voilà: la casa


La Mery, en borroso disfrute
Y después de la visita, y sin haber terminado los belcebús de Helsingborg, nos dimos al piro, con una potencial invitación a cenar otro día, bajo el brazo, contentos de haber venido al show rural (gracias a Kalle por la invitación y la espléndida visita), y más contentos todavía pensando en las crêpes que nos íbamos a cenar.







jueves, 16 de agosto de 2012

Practicando.. en sueco

Llevo un mes y medio haciendo unas prácticas en Malmö, trabajando para el gobierno sueco y en su oficina regional en Skåne. Como os podréis imaginar tengo anécdotillas miles; no me caben en un post, ni tampoco en la cabeza. Sin embargo paso a hacer un suuuper resumencillo de mis prácticas.

Las prácticas me las vendieron como un trabajo con GIS....y un jamón, que yo me zampé encantada de la vida. En realidad lo que estoy haciendo es leerme todos los planes de conservación de reservas naturales, sintetizar info (a veces copy / paste pero sin esa opción, o sea, teclea que teclea ) y digitalizar polígonos que no están digitalizados. Todo esto con un programa propio del organismo en cuestión, que bueno, digamos que es un poco diferente al GIS, aunque GIS es la base. En realidad es una base de datos muy tocha con opción de cartografía, y que lo que se dice, muy rápido no funciona.

El primer mes me lo he pasado casi entero delante de la pantalla teclea que teclea. Las primeras semanas estuvo una de mis compis con la que voy a trabajar más. Muy graciosa, super maja y muy apaña. Horario fijo pero flexible siempre que en la ofi estés de 9 a 3. Cada uno se apaña y no hay que darle justificaciones a nadie de cuándo entras y sales ni de por qué. Ni mucho menos fichar. Hay dos momentos sociales al día "imprescindibles" a menos que seas yo al principio, je, je. Se llama "fika" y es lo que en España sería el desayuno y la merienda, 30 min cada momento. Aparte está la comida. Momento 1, todos los días a las9, no importa qué hagas, a las 8:59 te están tocando a puerta (en el mejor de los casos) para que bajes diciendo "Maria, kafe?" ( se me olvidó, de momento tengo despacho propio): Momento 2, creo que algo más flexible.. le tengo cogido menos la hora, digamos que sobre las 14h. Cuando hace sol no queda nadie en los despachos, todos, yo incluida, como lagartos en la terraza, sí, sí, terraza. Al principio no me resultaba muy fácil unirme a este momento. Cuando mi compi 1 se fue de vacas junto con el 98% de la gente, no había mucha confianza para decirles a los demás todo el rato, merepitesporfaquenotengoniapajoleraideadeloquehasdicho?
Así que no bajaba mucho. Ahora un poco más.

Hace dos semanas la cosa cambió. Ha llegado mi otro compi, compi n2, que trabaja bastante en campo, y ahí que me saca de paseo :) De momento de verdad que me siento como una turista. Llevo mi cámara, mi cuadernito, y además me lleva a las playas de Skåne (no valen malinterpretaciones, que os conozco fieles lectores :)) , y además nos ha estado haciendo un tiempo excelente para ir a la playa, aunque sea con pantalones largos de trabajo. Lo que hemos hecho es ver si se están cumpliendo los planes y solucionar la dudas de lo equivalente a los guardas en España. Matizo, eso lo ha hecho él. Mientras yo miro, trato de entender algo, pregunto, sonrío cuando me responden porque no me entero y asiento o hago un ruido tipo, muuu o  h aspirada depende del momento. Muy sueco todo esto aunque no lo parezca. Tengo la táctica depuradísima ya de tanto usarla! :)

Ayer me llevaron a una reunión en sueco, todo el día, con barbacoa incluida, muy interesante .....si me enterara, otra vez igual. Pero al menos me han presentado a más gente. Ya saben que hay una españolita graciosa (esto me lo digo yo porque lo valgo :) ) por aquí, que es "experta en GIS" (el missunderstanding funciona en ambos sentidos) y que va a estar un tiempito con nosotros. Me dan la mano, se presentan, me dicen algo y yo sonrío, sonrío mucho (ya sabéis lo que significa).

En estos momentos he conocido al hombre más alto de suecia, he visto una repoblación de cigueñas (que hacen porque después de irse de migración al sur, o sea, España, no vuelven---así en España no paran de aumentar las parejas), tienen invasión de babosas españolas que hacen que las vacas se indigesten, la costa está plagada de bunkers que hicieron, creo que por orden de GustavoV, con buenas vistas al mar, pero no a la tierra que hay detrás, me han dicho zonas de cría de unos leones marinos pequeños que es restringida pero "tu me llamas si quieres", a mi compi le han ofrecido alguna vez descuentos en el golf y no sé que más que no ha aceptado (y me lo creo), los campos de golf aquí están dentro de las reservas naturales, porque invierten en la conservación de los bosques que los rodean...

He descubierto que a los suecos les encanta que les hablen de España y les digas palabras en español. Es gracioso nos tienen idealizados; que vivimos genial, mucha fiesta, buena comida, buen vino (y barato), vamos! que sabemos aprovechar nuestro tiempo libre. No les falta razón en muchas cosas, pero creo que hay un poco de visión sesgada, igual que a la inversa. Ya sabéis que los tiempos de coche cuando uno va a campito dan para hablar de todo.. vida y milagros. Ayer me despedí con un "hasta mañana" y oye, lo primero que me han dicho hoy ha sido algo sobre eso, y se han despedido de mi con un "hasta mañana" también.

Muy majos mis compis.... estoy contenta :)

Ya os contaré más anecdotillas..

Hasta la próxima entrega....

jueves, 9 de agosto de 2012

Parecido a una entrevista / Liknande en intervju

¡Hola gente!

Hoy he tenido lo más parecido a mi primera entrevista en Suecia y en sueco. Y digo lo más parecido porque no ha sido una entrevista para un puesto concreto, sino para explorar, calibrar, considerar (siga Vd. añadiendo eufemismos) posibilidades laborales. A pesar de todo ello, yo estaba todo lo nervioso que se puede estar en lo-más-parecido-a una entrevista laboral en muuuucho tiempo. Es decir, cagao.

Después de culminar un primer ciclo de unos 5 meses asistiendo a cursos de sueco, y un segundo ciclo de (hasta ahora) 5 meses de prácticas en SLU, todo ello sazonado con una pizca de "qué-ganas-de-currar-leñe", pensé (espero que acertadamente) que ya podía enfrentarme a un "evento" semejante en sueco. Bueno, al menos entender y hacerme entender má-o-meno. Pero como uno no puede decidir que le entrevisten cuando uno quiere (es lo que tiene no ser jurgolista), y dada la cantidad espeluznante de llamadas recibidas hasta el momento (está el teléfono que quema, vamos vamos), decidí recurrir a las tantas veces mentadas ETT y, en concreto, empezar con un pez gordo: Adecco (Dom y Clau, me he acordado taaanto de vosotros).

Así que ayer me planté con mi camisita y mi canesú en la reluciente (y... ¿desierta?) oficina de Adecco. Puerta cerrada, llamar timbre, ver torcer la esquina al otro lado del laaaaargo pasillo a alguien, ese alguien abrir la puerta, y.... ¡glups! ¿Cómo iba a empezar? ya se me ha olvidado, mira que le he dado vueltas mientras iba al manillar... Ah, sí: ¡¡AAAAAAY PAAAAYO, DAME UN CUUUURRO!!

Conseguí frenar mis instintos gitanoides mientras observaba al tipo que me había abierto la puerta, una especie de Ben Kingsley en sus tiempos mozos y vestido de forma normal (todo lo normal que puede vestir un sueco) en vez de con un trapo blanco. Sin apartarnos en exceso de la puerta, el tipo, que responde al nombre de Mats (más sueco es difícil), atendió a mis balbuceos con gran presencia de espíritu (y una sonrisa), y tras recibir mi tuneado CV me citó amablemente para una entrevista esta mañana.

Y con mi (otra) camisita y mi (mismo) canesú acudí como un reloj a la cita. Me recibió en la desierta oficina una mujer que me ofreció café (como no), y poco después llegó Mats, que me ofreció café de nuevo. En un gesto sabio (o eso pensé yo) para mis nervios, decliné ambas invitaciones, a lo que ambos respondieron con mirada circunspecta (qué bonita palabra). Aquí lo del café es un tema serio, la próxima vez digo que sí, aunque deje la taza enterita.

Mats me invitó a entrar en un cubículo modernillo con unas sillas modernillas, en una de las cuales senté mis modernos aposentos. Durante una hora, con mi currículo en la mano, estuvo preguntándome sobre mi experiencia, mi situación y mis intenciones/ambiciones, pero también (y un rato) sobre el deporte que hago, lo cual me hizo alegrarme de haber seguido los consejos de poner esa información en el CV, y de estar siguiendo los Juegos Olímpicos (también me preguntó por las medallas de España). Son casi tan frikis del deporte como del café.

No es que yo haya hecho muchas entrevistas laborales en mi vida, pero supongo que por otro tipo de experiencias, uno se da cuenta de las diferencias entre cómo se hacen aquí, y cómo en España (salvando el "pequeño" detalle de que esto no era realmente una entrevista para un puesto concreto). Lo del deporte es una muestra, pero sí parece que se interesan en de dónde vienes, no sólo geográficamente sino a nivel de experiencias. Quieren comprender tu trayectoria, por qué estás donde estás ahora, y que te llevó a ir a este sitio o hacer estas cosas. Sin que en mi currículo aparezca mencionado Málaga en ningún momento, ha salido en la conversación y ¡sorpresa! sus padres tienen una casa a apenas unos kilómetros de donde viven los míos, y él va con frecuencia. También me ha preguntado bastante por los "bosques en España", cosa que no me suele sorprender por lo creencia generalizada de que, en especial el sur, España en un desierto. Pero Mats sabía de lo que hablaba, también cuándo me ha preguntado por especies forestales concretas (algo que me ha sorprendido algo más): él mismo ha trabajado en la industria unos años, y tiene un hermano que trabaja en una consultora ambiental en Malmö. Una buena casualidad.

Mi impresión final ha sido bastante buena, no tanto por mi sueco como por el hecho de haber tenido contacto personal con alguien con potencial de ofrecerme algo, para empezar algunos contactos en nuestro campo, y ojalá algo más, pero ya veremos. Mantendremos informados, estad atentos a nuestro boletín sem... digo mens... bueno, da igual. Estad atentos, leñe.