El debate sueco sobre la inmigración / Sveriges debatt om invandringen

El jueves pasado nos sorprendió el telediario de las 9 con un interesante debate sobre inmigración, y digo "sorprendió" por dos razones: la primera, por incluir un debate en el telediario (que se llevó la mitad de su duración), y la segunda, por los tertulianos: ni más ni menos que Annie Lööf, Ministra de Inmigración y  líder del Partido de Centro, Centerpartiet), y Jimmie Åkesson, líder del Partido de los Demócratas de Suecia, Sverigedemokraterna, que por si no lo recordáis, queridíííííííííísimos lectores, de una entrada anterior, no es otro sino el partido racista-xenófobo sueco. Vamos, la extrema derecha, que aquí tiene representación oficial en el Parlamento.

Cuando vi a estas dos personalidades en la mesa de debate me dije: "esto va a ser interesante". Cuando terminó el debate, me dije: "ha debido ser interesante". Porque claro, amigos, no me enteré de un nabo. Peeeero, aparte de leer tranquilamente (y posteriormente) sobre lo que se dijeron Lööf y Åkesson en el debate, lo que sí vi, y me gustó bastante, es el respeto (el uno al otro, y también al turno de palabra) y educación con el que se trataron ambos. Y muy al estilo sueco, con un tono de voz neutro (seguro que algún sueco rebatiría esta apreciación y vio furia y salidas de tono, pero vamos, comparado con lo que es el tertuliano español medio, estos dos parecían dos osos amorosos).



Entrando en el debate en sí, que nos interesaba bastante por razones obvias, os podéis imaginar las posturas de ambos. Bueno, al menos la de Åkesson, evidentemente contrario a la inmigración, de la que dijo que reporta muchos costes a Suecia y pocos beneficios, que genera problemas de integración y que se compone sobre todo de gente no cualificada que no pueden aportar mucho a la sociedad, entre otros. La ministra Lööf, que pertenece al gobierno conservador, actualmente en el poder (*), argumentó a favor de la inmigración (y esto puede parecer sorprendente a nuestros ojos, acostumbrados a que la visión conservadora sobre este asunto sea a veces casi apocalíptica).

Entre otras cosas, Lööf dijo que uno de los retos de Suecia es traer más inmigrantes, para integrarlos en el mercado de trabajo y que, de esta forma, contribuyan a la continuación y mejora del estado del bienestar. En este sentido comentó que, de no ser por los inmigrantes, el 80% de las municipalidades suecas habrían perdido población en el último año, con el consiguiente "agujero" en su financiación. También dijo que en 15 años habrá 1.6 millones de pensionistas en Suecia, y que de no contar con la contribución de los inmigrantes, será muy difícil afrontar el gasto que eso supone. Y que, si bien el paro es preocupante (¡el 7%! :-)), también se necesitan trabajadores.

Todo esto me recordó a una cita que leí al poco de llegar a Suecia, precisamente del anterior Ministro de Inmigración, Tobias Billström (el cambio de ministro creo que se produjo hace un mes, más o menos). Dijo este buen hombre algo así como "todo el que quiera trabajar es bienvenido en Suecia".

Bien. ¿Qué pensamos nosotros, que estamos entre esos cuantos miles que Åkesson mandaría de vuelta a su casita rápidamente?
- Tanto a nivel oficial (el Gobierno sueco tiene publicada una lista de profesiones de las que hay carencia de mano de obra en el país) como oficioso (en páginas de empleo privadas, y en conversaciones con las empresas de nuestro sector en las ferias de empleo a las que hemos ido), parece que aquí hay bastantes posibilidades de trabajar, al menos más que en España.
- Por otro lado, a pesar del discurso oficial de la ministra Lööf, el gobierno sueco lleva más de un año cortando el grifo a la entrada de inmigrantes. Esto lo sabemos de buena fe, puesto que, además de vivirlo en nuestra cannnnes, nos lo han dicho en las dos agencias oficiales más implicadas en el tema: Skatteverket (la que gestiona los impuestos y el famoso personnummer) y Migrationsverket (la que gestiona los permisos de entrada residencia en el país).
- El idioma es la auténtica barrera a superar. Lo necesitas para trabajar y, supuestamente, el gobierno de ayuda a aprenderlo a través de su programa gratuito "Sueco para inmigrantes". Sin embargo, para acceder a ese programa necesitas el personnummer, y como han cortado el grifo, casi la única forma de conseguirlo a día de hoy es encontrando un trabajo relativamente estable. Pero para conseguir un trabajo estable necesitas hablar sueco.... ¿me seguís? una pescadilla que se muerde la cola. A nosotros, de hecho, nos han denegado el personnummer. Afortunadamente, ya llevamos unas cuantas semanas estudiando el idioma (pagando, claro), menos mal que no nos dio por seguir esperando al numerito de los coj****....


(*) Tras las pasadas elecciones, se formó una alianza de partidos conservadores, denominada La Alianza (Alliansen) (como veis, no se comen mucho la olla esta gente con los nombres), actualmente en el poder, y liderada por el Partido Moderado (Moderaterna), cuyo jefe es el actual primer ministro, Fredrik Reinfeldt. Pronto, una entrada sobre los politiqueos de los grandes partidos en Suecia. Pero con el ladri de hoy ya habéis tenido para rato :-)

Sobre el sistema educativo

Apareció hace unos días en el periódico regional, Sydsvenskan, una editorial sobre los retos y problemas del sistema educativo en Suecia. Me pareció muy interesante al compararlo (como siempre, y es que es instintivo) con la situación en España.

Aunque es sabido que, de entre los países escandinavos, Finlandia es el número uno en calidad educativa (calidad en lo que se refiere a formación, a resultados, a motivación del alumnado, etc), podríamos presuponer que Suecia anda ahí ahí, pero lo cierto es que anda bastante por debajo de Finlandia (Finlandia es la segunda "potencia educativa" del mundo tras Corea del Sur; Suecia está en el puesto 18, y España en el 31) [Las clasificaciones son del famoso informe PISA].

Evidentemente, los suecos se comparan con los finlandeses (hola holita, vecinito), y lo que viene a decir el editorial es que algunos expertos recomiendan copiar un aspecto del sistema finlandés, y no es otro que el de dar más autonomía al profesor para elegir su método de enseñanza. Como no soy en absoluto un experto en este tema, entiendo que cuando dicen "método" no se refieren a la forma de enseñar, ni a los libros, sino a algo más integral, vamos, que el maestro en Finlandia debe tener mucha libertad para llegar a los estudiantes y transmitirles las enseñanzas sin tanto marco educativo, ni niveles, ni mucho menos reformas continuas del sistema (por no hablar de lo de tener 17 sistemas educativos diferentes, ni de los recortes en educación, ni de las continuas subvenciones a la educación privada y la desatención a la pública, que es la de todos...) (por cierto, al hilo de esto, siempre me llama mucho la atención lo "patriotas" y "antinacionalistas" que son los políticos españoles, de boquilla, pero a la hora de la verdad cómo arañan todos para su Comunidad Autónoma... a mi me parecen bastante nacionalistas de su región).

Ay, que me pierdo. El artículo lo expresa así: "(...) el factor principal para el éxito educativo son los profesores y su forma de enseñar. Es en la clase, donde el profesor se encuentra con el alumno, donde se dirime que Suecia sea un país con un país mediocre en educación, o que esté entre los mejores. (...) El estudio compara con el éxito de Finlandia, con un alto grado de autonomía local y profesores bien formados que tienen una gran libertad para encontrar sus propios métodos para llegar al estudiante, y formarlo. (...) Las administraciones locales [de las que depende la educación] y los responsables de las escuelas han de dotar a los profesores de asistencia externa para que estos puedan, gradualmente, desarrollar sus propios métodos de enseñanza".

Animo a mis amigos maestros a comentar esta entrega, seguro que hay mucho que decir... Ojo, no vale mencionar las palabras/expresiones "privatización", "Aguirre" ni "me cago en sus muelas" en vano.